LA LUCHA DE CADA DÍA - REPORTAJE

Muchas personas tienen trabajos estables, con un sueldo fijo y algunos beneficios.

Pero la realidad para otros es distinta ya que tienen que batallar contra las adversidades que se le presenten e intentar sobrevivir tratando de conseguir como llevarse un pan a la boca.

“La vida siempre me ha sido complicada desde que llegue a Lima, hay días que no vendo nada y lloro al no poder darle algo de comer a mis hijos” cuenta la señora Juana Pardo (proveniente de Bambamarca – Cajamarca).

Muchas personas llegan a la capital esperanzadas con encontrar un mejor futuro, pero se topan con que la realidad es otra.

No encuentran trabajo, debido a no estar capacitados para uno o simplemente porque como dicen “la calle esta dura” y no hay “chamba” para nadie.

Así que buscan la manera de mantenerse ya sea vendiendo caramelos, lustrando zapatos, dibujando en los pisos, posando como estatuas, haciendo música, etc.

“Desde que vine de mi natal Trujillo, he trabajado de muchas cosas. Como chatarrero, cargando bultos en la parada y ahora lustro zapatos desde hace 2 años es duro pero hay que saber afrontarlo” explica Ricardo Huapaya.

Puede que estos trabajos sean muy sufridos, agotadores y hasta el punto de que simplemente en un día no consigas ni 10 céntimos pero siempre hay que conseguir el dinero de manera honrada y no del modo fácil como muchos hacen.

EL ESFUERZO TIENE SU RECOMPENSA.

Muchas personas empezaron como en los casos anteriores desde lo más bajo que se puede estar y a base esfuerzo lograron conseguir lo que tal vez para ellos les parecía imposible.

“Te diré que antes no tenía ni para el té, trabaje de vendedor de muchas cosas; caramelos, libros, juguetes, etc. Pero mi pasión por la música es lo que me hizo superarme.
Lo poco que tenía lo ahorraba y logre comprarme mi guitarra, con eso empecé a hacer música en las calles, componía mis propias melodías y a la gente le agradaba.

Fue así que decidí comprarme mi amplificador y desde ahí me fui con todo ahora he podido grabar unos discos propios que salgo a vender y no me quejo tengo clientes” manifiesta Eduardo Mugarra.

La palabra que debería estar en el diccionario de todos es el término “esfuerzo".

Porque con el se puede conseguir muchas cosas ya sea desde un pequeño logro hasta el mayor éxito posible.

CALLE PERO ELEGANTE.

“Mira sobrino, acá en Lima nadie te regala nada, es más hasta te juegan sucio si ven que empiezas a progresar.

Yo trabajaba en una tienda de ropa elegante, vendía todo lo que es camisas, corbatas, pantalones, correas, etc.

Fue ahí donde aprendí a diferenciar entre que era lo más complicado al momento de vestirse formalmente y era que la mayoría tenía problemas para hacer el nudo de las corbatas.

Yo tampoco sabía pero poco a poco aprendí y ahora soy un capo con los nudos pero hay gente que se le dificulta mucho” afirma Luis Celis.

Fue ahí donde se le vino a la mente una gran idea de la cual ahora tiene su pequeño negocio ambulante pero que lo hace de la mejor manera y honradamente.

“Compraba corbatas les hacia el nudo cortaba lo que sobraba del cuello de la corbata y les colocaba unos ganchitos que al engancharlos con los botones ya tenías tu corbata con nudo sin necesidad de hacerlo una y otra vez” comenta Luis Celis.

La solución está en el esfuerzo que tenga cada uno de superarse en esta vida, ya que no toda la vida vas a depender que alguien te regale algo, siempre hay que valerse por sí mismos y si tienes una idea emprendedora impleméntala puede que al final sea tú boleto ganador.

El esfuerzo y la dedicación siempre traen su recompensa.

¿Si tú no te esfuerzas, quien lo hará por ti?